Estados Unidos, 1992
Director: David Markey
Cliente: Savinen
Pudo verse en: Documentamadrid 2009
Ahora que es verano del tercer milenio y que el concepto de turismo de festivales ya es una realidad, me apetece echar la vista atrás y reseñar el documental que plasmó la que considero la madre de todas las giras. Una tournée por las citas festivaleras europeas con Sonic Youth y Nirvana como espina dorsal, a la que se vayan añadiendo aquí y allá bandas de la talla de Babes in Toyland, Dinosaur Jr o Los Ramones es para el que suscribe lo más cerca que se puede estar del cielo a los pies de un escenario.
Este sueño se hizo realidad en 1991, y el documental que hoy nos ocupa ha quedado para la posteridad como testimonio de un momento único en el que coincidieron unos Sonic Youth en la cúspide de su carrera, unos Nirvana al borde del éxito masivo y un sonido y filosofía, la indie, que estaba a punto de darle la vuelta a la industria musical como un calcetín.
Esta película significa mucho para mí porque, a mis 20 años recién cumplidos, supuso en mi universo particular un giro copernicano respecto a lo que la música representaba en mi cabeza y en mis intestinos, me inyectó un (dulce) veneno que ya nunca pude eliminar de mi sistema. Está llena de conciertazos memorables (no os perdáis el salvaje montaje de una actuación de Nirvana mientras suena “School” en el vídeo subtitulado que he subido a mi canal de Youtube), y trufada con momentos muy divertidos captados por Markey en el backstage o protagonizados por Thurston Moore, como el que acompaña estas líneas.
Subtítulos por Jota Martínez Galiana
La cinta tiene también su anécdota personal, porque, cuando la compré (en VHS, muuuundo viejuuuuuno), no tenía el nivel de inglés suficiente para entender las parrafadas de Moore y los demás entre concierto y concierto. Pero, azares de la vida, 17 años más tarde, que se dice pronto, van y me encargan su traducción. Casi se me escapa una lagrimilla. O sea, que por fin pude descifrar el argumento de uno de los vídeos míticos de mi juventud y, encima, cobrando. Viva esta profesión.
En fin, dedico esta entrada a todos aquellos con los que alguna vez he compartido grandes momentos en festivales y conciertos, y un abrazo en general a todos los que seguís esta página. Memorias de un Subtitulari cierra en agosto como casi todo en España, y volverá en septiembre. Feliz final de verano.
Qué casualidad, acabo de verlo hace unos días (sin subtítulos). Como corre el tiempo, han pasado 20 años y ¿cómo es posible que los festivales hayan cambiado tanto? (bueno, la música de los mísmos, que no nos olvidémos es lo más importante). Menuda fuerza escénica, menudas jodidas actitudes, impresionante chusma, ¡que peligro sónico! (Cobain pedísimo!!!)... Qué lejos señores, qué lejos.
ResponderEliminarOstras Jota, este reportaje lo vi con 16 años y alucinaba! Todos estos grupos me tocaron de jovencito y los he tenido que ver con criterio en actuaciones de esas rescata dinosaurios en primaveradounds y demás... pero jo, que pedazo de documento y que envidia poder traducir algo así! :D
ResponderEliminarSaludos!
Este post lo has escrito con el corazón.
ResponderEliminarSe te nota emocionado.
Que bueno.
Saludos y hasta septiembre.
Ay... Maldito "y, encima, cobrando", del que vive tanto vampiro.
ResponderEliminarUna abraçada, Jota!
Aurrera subtitulari!
Gary:
ResponderEliminarNo solo la música. De hecho, como yo tengo el gusto bastante desperdigado, siempre encuentro cosas que me gusten aunque a priori parezcan contradictorias. El problema, es un decir, de los festivales es, como todo, su excesiva mercantilización y la asunción por parte del público del mensaje aborregado y comercial de los organizadores, lo cual resta espacio a la improvisación y el romanticismo. Desde luego, uno ve este vídeo y lo compara con, por ejemplo, el Low Cost, en el que estuve la semana pasada, o el FIB cautivo y desarmado ante las hordas de la Pérfida Albión, y decididamente parecen cosas muy distintas.
Lluís:
Me alegro de que hayamos compartido esa fascinación temprana por las mismas bandas, y que además flipáramos con el mismo reportaje. Lo bueno es que Sonic Youth han mantenido y aún mantienen la compostura prácticamente sin altibajos (su concierto del año pasado en Razzmatazz fue una locura) y que a Nirvana, por desgracia a costa de la vida del pobre Kurt, no hemos tenido que verlos tocando calvos y barrigones para sacarse un pastizal escenificando un comeback a golpe de talonario en el Primavera. Eso me recuerda una entrada que publiqué en mi otro blog, que tengo casi abandonado y con amenaza de cierre, que puedes leer, si te apetece, aquí:
http://shit-happening.blogspot.com/2008/04/hroes.html
Toro:
Si es que la música me pierde, y este documental concentra la esencia de lo que, para mí, es el rock'n'roll way of life.
Un abrazo.
Suscribo lo que ya comentais.
ResponderEliminarLos festivales ya no son lo que eran por muchos y diferentes motivos, pero el factor fundamental es que la escena indie no es lo que era (comentario que me sitúa en la órbita de mis cuarenta añazos...).
Lo que en principio surgió como un movimiento casi virginal y espontáneo hoy está tomado por las multinacionales, que se forran a costa de los incautos indies (o es que alguien se cree que oasis fueron indies alguna vez?).
Nosotros vivimos el nacimiento del movimiento en nuestro pais y la caida hasta nuestros dias, donde las programaciones de los festivales son penosas.
Punto aparte es la actitud de las bandas actuales... ver en el low cost como se venera a un grupo de tercera división como mando diao y ver como se desgañitan athom rumba ante apenas 100 personas resulta frustrante.
Decir que ya no existen grupos como nirvana, babes in toyland o dinosaur jr es un atentado. Existen... pero no venden, por lo que no se les promociona.
Lo que nos queda es el "yo estuve allí" y poder contar que entre 50.000 personas pegando botes en primera fila viendo a sonic youth tocando death valley 69 en el fib del 98 me encontré a un enloquecido amigo que se dedica a escribir blogs de documentales subtitulados.
como va esa recuperación del low cost? todavía me despierto aterrorizado con los gritos de steve aokiiiiiiiiiiii!!!
abrazos!
:)
ResponderEliminarDisfruta y descansa, Jota.
Excelente reseña.
Haces q me den ganas de volver a subirme los levis noventeros por los sobacos y revivir tiempos mejores. Esperaremos la vuelta del blog en septiembre, q nada más q pones joyicas, jodío.
ResponderEliminarpd.-Es q sois la hostia, steve aoki con esas caras de mario vaquerizo en tó lo alto después de reggetonear en los tiki phantoms. Qué grandes sois y qué alegria veros al todo el equipo, abrazos a ayora siempre!
Muy buena la entrada del blog abandonado también :D
ResponderEliminarYo me niego a caer en aquello de que cualquier tiempo pasado siempre será mejor (que seguramente es verdad). Simplemente van cambiando las generaciones y los grupos. Por suerte, actualmente hay un montón de cosas bien majas por descubrir!
Feliz verano
Olá sou Magno Oliveira responsável pelo Blog Folhetim Cultural, convido lhe hoje a conhecer o nosso blog, que tem além de notícias, tem também atrações culturais. Como poesia, contos, crônicas e muito mais...
ResponderEliminarConto com sua visita no nosso espaço.
Blog: informativofolhetimcultural.blogpost.com
E-mail: folhetimcultural@hotmail.com
Twitter: @folhetimcultura e @oliveirasmagno
Que ya estamos en Septiembre,por si no lo sabías. Actualiza¡¡¡Saludos.
ResponderEliminarDesconocía que tuvieras un canal en el tubo, me lo agrego a favoritos. Gracias por tu trabajo.
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